El bacalao puede proceder de Groenlandia, de Noruega, de Islandia o de Escocia. En general, el buen bacalao se pesca en las frías aguas del Atlántico Norte, y llega a nuestros hogares fresco, congelado o en salazón. Tradicionamente hemos comido bacalao desalado en sus múltiples formas, pero su sabor es siempre inconfundible. En esta ocasión, hemos utilizado lomos de bacalao guisados al estilo tradicional, con tomate de la huerta confitado y pimiento morrón. Un plato sano, natural y muy sabroso, que aporta un saludable contundente toque a nuestra mesa.
Ingredientes, para cuatro personas:
Cuatro lomos hermosos de bacalao fresco, congelado o en salazón. En este último caso, habrá que ponerlos a desalar en agua fría el día anterior.
Un pimiento morrón asado al horno. También puede hacerse con pimientos rojos en conserva. Si se desea un toque especial por su sabor, con pimientos de piquillo.
Un kilo de buenos tomates muy maduros.
Sal, si no se trata de bacalao desalado.
Dos cucharaditas de azúcar.
Harina y un huevo, para el rebozado.
Aceite de oliva.
Elaboración:
Rodear cada filete de lomo de bacalao con una tira de pimiento, fijar con un palillo.
Pasar por harina y huevo batido, por este orden, y freír en aceite de oliva, con cuidado para que quede dorado, pero no quemado. Retirar en un plato con papel absorbente.
En una cazuela plana, poner aceite de oliva y verter los tomates rallados y despepitados, añadir dos cucharadas de azúcar, y cocer a fuego lento, hasta que quede hecho y desaparezca la acidez.
Colocar encima los trozos de lomo de bacalao, que habremos frito con sus palillos, para que mantengan el pimiento en su sitio, pero retiraremos ahora.
Servir sobre la cama de tomate caramelizado, dulce, suave y natural.
Truco: Si se desea un sabor más intenso y menos dulce en la salsa, puede añadirse un chorrito blanco en el momento de la cocción. el resultado tendrá mucho carácter. Hay que tener cuidado con el punto de sal de este plato, por lo que conviene probar, una vez incorporado el bacalao al guiso, por si fuera necesario rectificar de sal.